El Tribunal Provincial Popular de Artemisa (TPP) desestimó este miércoles 7 de febrero una solicitud de libertad condicional en favor del artista y preso político cubano Luis Manuel Otero Alcántara. La respuesta, entregada a sus familiares a través de la abogada del caso, plantea que esta figura jurídica no procedería puesto que «no se han alcanzado los fines de la pena y este [Otero Alcántara] no está en condiciones de enfrentarse a la reinserción social de una manera positiva ante la familia y la sociedad».
El artista contestatario, fundador y el rostro más visible del Movimiento San Isidro (MSI), fue encarcelado el 11 de julio de 2021, cuando se dirigía a participar en las manifestaciones antigubernamentales ocurridas ese día a lo largo del país, las cuales fueron reprimidas violentamente por el régimen cubano. En junio de 2022, fue condenado a cinco años de prisión —junto a su compañero, el rapero Maykel Osorbo Castillo Pérez (nueve años)— por los delitos de «ultraje a los símbolos nacionales», «desacato» y «desorden público».
Al momento de conocerse la negativa del TPP de Artemisa a otorgarle la libertad condicional, varios medios independientes de hicieron eco del hecho, así como la oficina en las Américas de la ONG Amnistía Internacional, que considera «preso político» a Otero Alcántara.
Claudia Genlui, curadora de arte, activista y miembro del MSI, comentó a El Estornudo cómo ha sido recibida la noticia por el artista y brindó información actualizada sobre su estado en prisión. «Suelo hablar con él dos veces a la semana, casi siempre llama a la 1:00 p.m., y por eso sé que de ánimos está un poco devastado. Esto, como quiera que se mire, representaba para él algún tipo de esperanza», dijo. «Por lo demás, está bien de ánimo y sigue trabajando en nuevas obras. Su salud, de momento, se mantiene estable».
La denegación de la libertad condicional para Otero Alcántara es también un cubo de agua fría sobre las esperanzas de sus familiares y de muchos cubanos y cubanas que desean su excarcelación. Sin embargo, de acuerdo con las leyes y procedimientos del régimen, es muy probable que esta nunca hubiera estado ni siquiera cerca de concretarse.
«La libertad condicional es un beneficio legal que ofrece la posibilidad de liberación anticipada a personas con sanciones de privación temporal de libertad o de trabajo correccional con internamiento. Se trata de un mecanismo regulado por la Ley de Ejecución, donde la elegibilidad para la libertad condicional se hace depender de varios factores como la edad de la persona sancionada, si es reincidente o no, o si parte de la pena está cumplida. Una vez otorgada, el individuo entra en un periodo de prueba por un tiempo igual al resto de la sanción que le quede por extinguir, durante el cual deberá cumplir con ciertas obligaciones», explicó a El Estornudo la organización Cubalex, dedicada al monitoreo y asesoramiento jurídico en materia de derechos humanos.
Aun cuando la libertad condicional es una opción para todas aquellas personas que no han sido condenadas a privación perpetua de la libertad, dicha figura resulta particularmente limitada por las autoridades judiciales del país cuando se trata de presos políticos; ello, bajo el amparo de términos tan discrecionales como «buena conducta» o «resultados positivos alcanzados en la actividad educativa del sancionado».
El pasado 5 de febrero, en el programa Empodérate Cubano de la periodista Iliana Hernández, el abogado Raudiel Peña, de Cubalex,señaló que la falta de transparencia y la discrecionalidad judicial de los beneficios penitenciarios, sumadas a la interpretación selectiva y políticamente motivada de los criterios legales, configuran en Cuba un panorama donde los derechos humanos de los presos políticos son sistemáticamente vulnerados, incluido el derecho a la libertad condicional.
«La exclusión de presos políticos de estos beneficios, a pesar de cumplir con los requisitos legales, refleja una estrategia deliberada del Estado para mantener el control y enviar un mensaje de advertencia a opositores y activistas, evidenciando así la instrumentalización política de la justicia penal en Cuba», declaró Cubalex.
El otorgamiento de la libertad condicional se guía por lo establecido en la Ley 152/2022, «De Ejecución Penal», específicamente en su Artículo 144.1. El inciso c de esa norma dicta que, previa solicitud, la libertad condicional puede ser otorgada al sancionado primario en la comisión del delito si este ha cumplido para entonces la mitad de su condena. En el caso de los reincidentes y multirreincidentes (inciso d), el beneficio se otorga cuando este ya ha cumplido las dos terceras partes de su sanción. Por su parte, el Artículo 145 de la misma legislación indica que el Ministerio de Justicia, atendiendo al criterio del Ministerio del Interior (MININT), puede solicitar la libertad condicional de un reo al Tribunal Supremo Popular.
Sobre este tema El Estornudo pudo conversar con un abogado penalista actualmente en funciones dentro de la isla, quien pidió no ser identificado por temor a represalias. Según él, atendiendo estrictamente a la Ley, Luis Manuel Otero Alcántara sí es apto para ser beneficiado con la libertad condicional.
«Puede que él haya estado preso en otras ocasiones, que sea molesto para las autoridades, y por eso lo encerraran un día sí y otro no, pero eso no significa que sea reincidente o multirreincidente», señaló la fuente. «Estos conceptos solo se aplican cuando la persona ha sido sancionada con anterioridad, y la sentencia respecto a esos delitos haya adquirido firmeza. Por tanto, de acuerdo a la Ley, Luis Manuel puede optar por la libertad condicional cuando haya cumplido la mitad de su sanción. Y como la prisión provisional abona al cómputo del cumplimiento de la sanción, la mitad de su condena fue en enero de 2024».
Otra vía para conseguir la libertad condicional de Luis Manuel Otero Alcántara sería con el beneplácito del MININT, que podría presentar la solicitud tras avalar que el recluso se encuentra reeducado. Al respecto, razonó el letrado: «La reeducación es discrecional, más en estos casos. Para que Luis Manuel se reeduque en los términos que el MININT establece debiera demostrar que se desvinculará de los temas políticos, o que continuará, pero en favor del gobierno, y que se integrará a organizaciones políticas y de masas legales en el país. Sin embargo, él no está en esa situación ni lo va a estar, y eso lo saben el MININT, los tribunales, la Fiscalía y el gobierno».
«Por los delitos por los que lo procesaron y su motivación, que es política, es poco probable que las autoridades lo declaren reeducado», prosiguió el abogado penalista, quien ejerce desde hace más de diez años en La Habana. «Sin contar que Luis Manuel ha mantenido su manera de pensar, ha realizado huelgas de hambre en prisión y ha seguido presentando su obra en exposiciones fuera de Cuba. Eso a la Seguridad del Estado no le sienta nada bien».
***
Por otra parte, Claudia Genlui ha descrito el trabajo creativo de Luis Manuel Otero Alcántara desde la cárcel como un proceso complejo que no se ha detenido gracias a su tenacidad y la colaboración de varios cubanos y cubanas en el exilio. «La producción artística de Luis Manuel, incluso en sus condiciones, responde a la necesidad que él tiene de crear y a esa frase que siempre repite, casi como un lema de vida, de que el será el arte la que lo salvará», subrayó la curadora.
«Existe un equipo de trabajo que lo apoya y lleva a cabo sus proyectos», explicó Genlui. «Él llama por teléfono unos diez o 15 minutos como máximo, y en ese tiempo nos dice qué quiere hacer, cómo lo quiere hacer. También nos pide información que tratamos de llevarle a Cuba, como artículos digitales sobre arte que su tía imprime y le lleva a prisión. No es algo lindo por la frustración y el dolor de no tenerlo libre, porque él no puede disfrutar de los resultados de su propia obra. Ahora está escribiendo poemas, y ha pintado mucho, aunque ya no le dejan sacar sus dibujos».
Tras su encarcelación en el verano de 2021, la obra de Luis Manuel Otero Alcántara ha sido expuesta en varias ocasiones fuera de la isla. En abril de 2022, por ejemplo, tuvo lugar en The Art Space de Miami la exposición unipersonal Alcántara, un artista en prisión —comisariada por la propia Genlui, y apoyada por Bacardy Family Foundation, Espacio 23 y I’ve Been Framed. Varias de sus piezas formaron parte de la muestra colectiva Ya nada es como antes, curada en abril de 2023 por Abel González Fernández en el Museo Hessel del Centro de Estudios Curatoriales del Bard College de Nueva York. Su trabajo también fue incluido en la exhibición You Know Who You Are de El Espacio 23 durante la Semana del Arte en Miami.
En 2022, Otero Alcántara recibió el Premio Prince Claus Impact Award, otorgado cada dos años a seis artistas y profesionales de la cultura internacionales «en honor a la excelente calidad de su obra y a su contribución positiva al desarrollo de su sociedad».