Profesora investigadora en el Departamento de Humanidades de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Cuajimalpa, Ciudad de México. Su trabajo se centra en las problemáticas de las prácticas artísticas y estéticas, las memorias, las representaciones de las violencias, el duelo, la performatividad de la falta por desaparición forzada, las teatralidades y performatividades expandidas y sociales. Entre sus libros destacan ‘Cuerpos sin duelo. Iconografías y teatralidades del dolor’ (2013, aumentado y corregido en 2016); ‘Cuerpos ex/puestos. Prácticas de duelo’ (2009); y ‘Escenarios liminales. Teatralidades, performances y política’ (2007, traducido al portugués en 2011, aumentado y revisado en 2014). Es curadora independiente de exposiciones y proyectos vinculados a los temas que investiga.
Walter Benjamin definía el momento mesiánico como una Dialektik im Stillstand, una dialéctica suspendida: a la espera del acontecimiento mesiánico, la vida queda suspendida. ¿No...
Mercy Olivera nació con AME tipo II, una variante en que los casos rara vez rebasan la adolescencia, y eso, junto al hecho de que es madre, resulta un indiscutible desafío a la ciencia médica. Se conoce, sin embargo, que hay quienes han vivido hasta los 30 años con tratamientos especiales, y también rarísimas excepciones que han sobrepasado por muy poco los 40. Mercy tiene ahora 39 años y siente que el tiempo se le acaba.
El proceso del perdón es irreversiblemente político y, por ello, una fuente de ataques partidistas. El espíritu de reconciliación nacional invocado por Gerald Ford en 1974 ha desaparecido 50 años después.