Fui por primera vez a La Habana en 2016, año de grandes acontecimientos históricos para Cuba: la primera visita de un presidente norteamericano (Barack Obama) tras la Revolución de 1959, la vuelta de algunos viejos exiliados, el recital de los míticos Rolling Stones, la muerte de Fidel Castro…
Ahora vuelvo cada año porque La Habana me atrapó emocionalmente. Parece una de esas ciudades de Italo Calvino.

Desde el primer momento sentí como que el tiempo no avanzaba. Todo se ve como en las imágenes de los grandes fotógrafos que visitaron la ciudad en los últimos treinta años. Todo detenido a pesar del auge turístico y la incipiente apertura capitalista.

Aun en medio de circunstancias históricas, los habaneros parecen tomarlo todo con mucha calma o, mejor dicho, los habaneros han aprendido a apresurarse con calma.
Así nació esta serie: Un apuro lento.
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Marcelo Caballero: Fotógrafo argentino radicado desde 2010 en Barcelona, España, donde cofundó el colectivo de fotografía urbana Calle 35.
Graduado en 1992 de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad de La Plata, Argentina. Ha colaborado en los diarios Clarín y El Día, así como en revistas de viaje.

Caballero ha expuesto su trabajo en ciudades como Barcelona, Las Palmas, Ciudad Real, Miami, Perpignan y Buenos Aires. Asimismo, ha participado en los festivales Ojo de Pez Photo Meeting Barcelona, Biennal Xavier Miserachs, el DOCfield (Barcelona), el Visa Off (Perpignan) y el Miami Street Photography Festival.
Actualmente colabora con diferentes publicaciones y agencias fotográficas europeas. Imparte conferencias y talleres/viajes fotográficos.

Escribe sobre fotografía documental en su blog Miradas cómplices.
Libros fotográficos: Colores humanos (Calle 35 / The Folio Club. Barcelona, 2015); Legenda gerundae (The Folio Club. Barcelona, 2018); Ocre (Camera Infinita, 2019); Un apuro lento (Camera Infinita, 2019).
(Texto y fotografías autorizadas por Marcelo Caballero).