Esta es una serie de 12 fotografías analógicas superpuestas, a manera de doble exposición. Se manejan con este procedimiento técnico dos voluntades, dos formas de entender la ciudad.

Por una parte, aquella de la fotografía analógica, vinculada a la planificación, al arte entendido como proceso —medición de luz, revelado, fijado, escaneado—; mientras, por otra, intervienen procesos digitales como la superposición conseguida mediante trabajo digital que habla sobre dinámicas asociadas a la tecnología. 

Kevin Sánchez (Kesape). Proyecto de ciudad II.
Kevin Sánchez (Kesape). Proyecto de ciudad II.

Los elementos se relacionan con una ciudad que se construye —y destruye— cada día, donde constantemente intervienen elementos arquitectónicos de muchas épocas y estilos, a manera de collage en desarrollo.

Según mi visión, La Habana es un pastiche a gran escala. Un espacio donde las soluciones arquitectónicas y las necesidades de vida de las personas colisionan y se subordinan unas a otras cíclicamente. 

Kevin Sánchez (Kesape). Proyecto de ciudad II.
Kevin Sánchez (Kesape). Proyecto de ciudad II.

Esta resulta la continuación de la serie Proyecto de ciudad, anteriormente mostrada en el espacio de galerías de El Estornudo. En tal sentido constituye una especie de cierre temático y conceptual para el conjunto de fotos anteriormente mostrado, y una nueva propuesta visual vinculada con la representación imaginaria que pretendo hacer de la ciudad. 

Se trata de una serie incompleta, un trabajo en proceso constante. Como la ciudad misma y fenómenos que le dan forma.

En el statement de la serie, escrito por Abram Bravo, puede leerse: 

Kevin [Sánchez (1998)] decidió olvidarse de la excitación del que apresuradamente descubre para dar paso a un discurso mucho más compacto: enfocado en desmantelar la imagen de una Habana para armar, con precisión casi quirúrgica, su propia quimera de ciudad muda. Y es que la ciudad de Kesape alardea a destiempo sus excéntricas moles de concreto, disimula sus cicatrices a base de orgullo y danza inerte al compás de la sinfonía del silencio.

Su gesto fotográfico puede situarse en medio de la nostalgia y el tributo, consciente de lo que es y fantaseando con lo que pudo ser. Mueve edificios como piezas en un tablero, se olvida de los rincones y proyecta contra el cielo el tejido arquitectónico: alto y claro, sin retórica innecesaria. Entonces se toma un tiempo para explorar, para rendir tributo a la misma fotografía, y nos presenta una Habana digital enfrentada a otra analógica: así mezcla presente y pasado, decepciones y sueños, anhelo e historia. Luego cuece la imagen alterando el contraste para que cada mole se forme de lo que la luz arrebata a la sombra. Y en esa monumental dispersión de viejas glorias ubica Kevin su ciudad incompleta. Incompleta porque necesita de todos para armar su rompecabezas. Al final siempre ha sido así: aquí cada quién se inventa su propia Habana. 

Kevin Sánchez (Kesape). Proyecto de ciudad II.
Kevin Sánchez (Kesape). Proyecto de ciudad II.

[Texto y fotografías de Kevin Sánchez (Kesape)].