En La Habana ya se empiezan a ver personajes comunes por estas fechas, hombres y mujeres que en actos de fe recorren la ciudad hasta El Rincón. Historias que se repiten cada año pero que no dejan de ser impactantes, por sus grandes esfuerzos físicos y muestras de perseverancia, pero también porque dejan ver que aún en La Habana queda un poco de fe.