Real Madrid
-
Héctor, el barcelonista
Su última gran alegría fue en 2015. Cuando el club ganó su quinta Champions, y los jugadores alzaron la copa entre serpentinas y confetis, Héctor agarró eufórico su bandera blaugrana, la amarró a una vara y salió en bicicleta por el barrio.
-
Abel Eduardo, el madridista
Supersticioso confeso, se persigna cuatro veces antes de comenzar cada partido y luego besa su anillo. Le confiere diferentes poderes a cada una de sus camisetas del Madrid. Una funciona para que marque Ramos, otro para los clásicos, otro para las finales.
Se utilizará de acuerdo con nuestro Aviso legal y de privacidad
Más Comentados
«El reguetón erotiza la violencia patriarcal» y otras preocupaciones de feministas blancas
Exiliados, arrasados
El hambre de los 80